Pedro Calderón de la Barca es el último dramaturgo mejor del Siglo de Oro. Él continua y mantiene las mismas características de La Comedia que sus precesores habían establecido. Sin embargo, alcanza La Comedia por su inteligencia y al constuir las obras con precisión. Su estilo es como el estilo barroco con mucho distorción, movimiento y otros elementos decorativos.